No hay una prueba médica que pueda decirle a su profesional médico cuál nivel de dolor puede estar sintiendo después de una lesión o cirugía. Esta información debe venir de usted, el paciente. Aprendiendo la manera de describir honestamente y clasificar su dolor va a ayudar a que su doctor determine la mejor manera de controlar el dolor y ponerlo en buen camino para su recuperación.